Reservados todos los derechos por
el autor Homero D Shappley

Fotografía del título artístico para el Comentario sobre Apocalipsis por Homero D. Shappley compuesto de piezas de ajedrez y palabras claves sobre un mapa plano del mundo, la gráfica en tonos de azul y los textos de color oro.

Capítulo Seis de este Comentario

Espantoso drama de dos
grandes bestias apocalípticas

Capítulo 13 de Apocalipsis

La Primera Bestia de Apocalipsis 13
sube del mar.

Acto 1   |   Escena 1

Fotografía de calles y aceras atestadas de vehículos y personas de una ciudad grande moderna, ilustración para el Comentario sobre Apocalipsis por Homero Shappley.

 

Imagen de una ciudad futurista con rascacielos altos y una avenida anchísima que conduce al horizonte donde emerge una esfera enorme contra un cielo de tonos marón claro y oro, ilustración para el estudio sobre La Primera Bestia que sube del mar de Apocalipsis, por Homer Dewayne Shappley.Escrutando las escenas cinematográficas de las visiones y profecías de las Siete Trompetas, pudimos apreciar que las grandes ciudades de actualidad tales como la Ciudad de México, Buenos Aires, Bogotá, Caracas, San Juan, Lima, Santiago, Santo Domingo, Los Ángeles, Miami, Chicago y Nueva York figuran en algunas. También, las demás ciudades y pueblos del planeta Tierra y todos los países, con todos sus habitantes, no exceptuándose usted y este servidor. 

Otras visiones de Apocalipsis proyectan Dramas de la categoría “Espantosos” mediante las que se escenifican de manera espectacular y electrizante el desarrollo e impacto de grandes y fuertes entidades seculares-políticas-religiosas desde el inicio de esta Era Común, las que tenían antecedentes aun en los tiempos previos a esta presente Era. Presenciarlos y entenderlos resulta muy instructivo, especialmente en contextos religiosos-espirituales. A esta categoría de “Dramas espantosos” pertenece el de “Dos grandes bestias de Apocalipsis 13”. Cordialmente, le invitamos presenciar atentamente las Siete escenas de este gran Drama lleno de colorido y figuras metafóricas inolvidables.

¡Ah! Acaso se mofe usted de esas “bestias” de Apocalipsis, clasificándolas de “creaciones fantasmagóricas de mitologías antiguas, absurdas y repugnantes”? Pues, sacadas de su contexto, bien habría justificación para semejante concepto de ellas. En cambio, identificadas acertadamente en su contexto, la mente informada, perspicaz y objetiva comprende pronto que se trata, en realidad, de entidades terrenales ya básicamente seculares-políticas, ya religiosas de índole idolátrica, politizada y mundana. En términos generales, tales entidades pueden ser o mayormente benignas y pacíficas o verdaderamente bestiales, horripilantes, criminales y destructivas hasta en grado sumo.

De ser usted una persona observante y tener conocimiento siquiera rudimentaria de la historia de la humanidad, sabrá que lo que acabamos de afirmar tiene fundamento. Como ejemplo, las naciones del siglo XX y principios del XXI que embrollaron a cientos de millones de seres humanos en dos Guerras Mundiales y otras de menos alcance, mas, sin embargo, iguales de atroz, además, en numerosos pogromos y genocidas que empaparon de sangre a la tierra dondequiera que fueran ejecutados, merecen ser categorizadas de "bestiales, horripilantes, criminales y sumamente destructivas".​ 

Imagen de un humanoide guerrero bestial típico de los seres fantasiosos feos y repugnantes que pueblan juegos digitales, cómicos, etcétera, de algunas culturas modernas.Retrato de una pintura de dos bestias fantasiosas cuyos jinetes se enfrascan en conflicto mortal, imágenes de alguno juego digital.¿Con qué razón tropezaría usted a causa de la representación metafórica en Apocalipsis de las naciones como “bestias”? Los juegos electrónicos y muchas obras cinematográficas de la vasta industria digitalizada de entretenimiento, más incontables publicaciones impresas de distintas categorías, están saturadas de la misma clase de imaginaría. De monstruos increíblemente feos, grotescos, repulsivos, violentos, vengativos, crueles, desalmadas, salvajes, sádicos y destructivos.

Naciones, imperios y gentes, algunos más o menos “buenos”, otros, malos de cepa, opresivos, explotadores y belicosos. Estos son temas grandes y muy populares de juegos electrónicos, innumerables cinemas, videos, cómicos y obras literarias de ficción. De sueños y pesadillas. De realidades del mundo material-físico, pasado y presente. Y ¡también de APOCALIPSIS!

Entonces, ¿por qué rechazar de plano a Apocalipsis por tratar los mismos temas? Un libro grandioso que los aborda concisamente con lenguaje descriptivo espectacular. ¡Escrito para ser entendido!Hecho resaltado en el Capítulo Uno de este Comentario. Si los jóvenes y adultos jóvenes de actualidad dedicaran siquiera una tercera parta del tiempo, energía y concentración mental que invierten en los mundos, imperios y seres fantasiosos de los entornos digitales, a la investigación, el estudio y aplicación práctica de los escenarios, escenas y visiones audiovisuales de Apocalipsis, ¡tal vez llegaran a alcanzar gran entendimiento asombroso! La categoría de entendimiento, comprensión e inteligencia que, potencialmente, puede encaminar a vidas y almas a la creación de un mejor mundo aquí, con la esperanza de participar en el “mundo nuevo” perfecto del mañana. Hebreos 2:5; 2 Pedro 3:13; Apocalipsis, los capítulos 21 y 22

Así que, ¡ánimo! El Apocalipsis es para usted y para mí. Y no tan solo para maestros, predicadores y teólogos.

Respetuosamente, le ofrezco el siguiente estudio sobre las Dos Bestias de Apocalipsis, fruto de mis propias indagaciones extensivas. En el formato de “Actos, Escenas y Escenarios”. Comenzando con el “Acto 1, Escena 1” sobre la Primera Bestia de Apocalipsis 13. 

Sube del mar la Primera Bestia, terrible criatura con siete cabezas,
diez cuernos y un nombre blasfemo.

 Apocalipsis 13:1-2

Retrato de una pintura de una bestia con siete cabezas y diez cuernos que sube del mar, ilustración para el comentario sobre la Primera Bestia de Apocalipsis por Homero Shappley.“Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo. Y la bestia que vi era semejante a un leopardo, y sus pies como de oso, y su boca como boca de león. Y el dragón le dio su poder y su trono, y grande autoridad.” 

I. La primera bestia

“Me paré sobre la arena del mar, y vi subir del mar una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos; y en sus cuernos diez diademas; y sobre sus cabezas, un nombre blasfemo.” Apocalipsis 13:1

Retrato de una pintura que representa al apóstol sentado en una playa de la isla de Patmos y escribiendo en un pergamino las visiones y profecías de Apocalipsis.

Contándonos la historia de sus visiones divinas, el apóstol Juan dice, en Apocalipsis 13:1, que se paró “sobre la arena del mar”.

Quizás lo hiciera literalmente, parándose en alguna playa de Patmos, la pequeña isla donde vivía, desterrado, cuando recibió las profecías y visiones recopiladas en el libro intitulado Apocalipsis en el Nuevo Testamento.

Parado en aquella playa y mirando mar adentro, tal vez hacia la ciudad de Roma, al occidente, o quizás hacia el oriente, en la dirección de las siete iglesias de la provincia romana de Asia, destacándose la gran ciudad de Éfeso, se abre el telón de un nuevo drama profético, el cual identificamos como el Espantoso drama de dos grandes bestias apocalípticas.

Iniciándose la Escena 1 del Acto 1, el escenario panorámico que se abre delante de nosotros es el del “mar” mismo, del cual sube de repente una terrible criatura fantasmagórica, una bestia que tenía siete cabezas y diez cuernos “un nombre blasfemo. 

A. Esta primera bestia de Apocalipsis 13 sube del mar

“Vi subir del mar una bestia.” Apocalipsis 13:1

1. En las visiones que Daniel recibió en Babilonia durante el primer año del rey Belsasar, suben también del mar no una sola bestia sino “cuatro bestias grandes”

Retrato de una pintura por Joe Maniscalco de cuatro bestias que suben de un mar agitado por cuatro vientos, representación artística de la visión de Daniel.“Miraba yo en mi visión de noche, y he aquí que los cuatro vientos del cielo combatían en el gran mar. Y cuatro bestias grandes, diferentes la una de la otra, subían del mar. Daniel 7:2-3

Daniel ve subir del mar a cuatro bestias

Daniel 7:1-7
Pintura por Joe Maniscalco. Derechos reservados.

 “La primera era como león, y tenía alas de águila.” 

La segunda era “semejante a un oso.

La tercera“semejante a un leopardo.

Y la cuarta bestia era “espantosa y terrible en gran manera fuerte…
muy diferente de todas las bestias que vi antes de ella, y tenía diez cuernos.”

2. ¿Qué simboliza el mar, o “el gran mar, en estas visiones?

Probablemente, lo mismo que las “muchas aguas” mentadas en Apocalipsis 17:1. 

“Ven acá”, dice el ángel al apóstol Juan, “y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que está sentada sobre muchas aguas.

Luego, explica el ángel, en Apocalipsis 17:15: 

“Las aguas que has visto… son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.

Pese a que “mar”, o “gran mar”, en las visiones de Juan y Daniel sean una alusión al Mar Grande, llamado también el Mediterráneo, el lenguaje de las visiones es metafórico, y, por consiguiente, no se trata de un mar material sino de lo que simboliza “mar”.

Dado que “mar” y “muchas aguas” pueden tomarse como sinónimos, nos parece lógico concluir que “mar” en las dos visiones también simbolice pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas.

De todos modos, veremos que las bestias no suben de un mar material aquí en la tierra sino de multitudes de gentes en distintos lugares, y que tanto las bestias como “la gran ramera” se sientan sobre ellas.

3. Tampoco serían materiales los “cuatro vientos del cielo”que combatían en el gran mar” sino que se trata más bien de figuras retóricas, las que representan, a nuestro entender, tormentas, convulsiones o luchas ideológicas-políticas-sociales-religiosas-económicas, las que surgen comúnmente entre las gentes de distintas naciones, razas y lenguas; entre reyes, emperadores, príncipes, ejércitos, sacerdocios, jerarquías eclesiásticas, etcétera. 

Retrato de una pintura abstracta de las cuatro bestias vistas por Daniel en visión que suben de un mar agitado fuertemente por cuatro vientos. “…combatían en el gran mar” significa que estos  “vientos” agitan fuertemente a las muchedumbres supersticiosas, mal informadas, ignorantes e inconstantes, como si fueran ellas tal cual ondas del mar llevadas para allá o para acá. Santiago 1:6-8; 2 Pedro 2:17; Judas 1:12-13

En medio de las “muchas aguas” turbulentas, se crean y salen, a veces, “bestias” realmente atemorizantes. 

“Vi subir del mar una bestia.” Retrato de una Pintura de las cuatro bestias que Daniel ve subir del mar: un león, un oso, un leopardo, y una bestia descomunal con siete cabezas y diez cuernos.

“Cuatro bestias grandes… subían del mar.” 

Ya pronto veremos el significado de “bestia” y “bestias”. 

  

Texto y composición de esta Página por
el autor
Homero D Shappley

editoriallapaz2@gmail.com

 

Acto 1, Escena 2. del Espantoso drama de dos grandes bestias de Apocalipsis 13. Las siete cabezas de la Primera Bestia identificadas como siete reinos terrenales, y no las siete colinas de Roma, ni siete emperadores romanos, ni siete formas distintas gubernamentales de los romanos.

 


 

Índice completo del Capítulo Seis

 

Índice de solo los textos que componen el comentario

Lista del contenido completo del comentario, incluso las imágenes

 

 

  

¿Le gusta esta página? Por favor, ayúdenos a difundir la información por medio de compartirla automáticamente con sus amistades de Facebook, Google+, LinkedIn, y Twitter pulsando en los botones arriba colocados.

Derechos reservados. Permiso concedido para hacer una copia, o múltiples copias pero ninguna para la venta.