Comentario sobre Apocalipsis por Homero D. Shappley
Reservados todos los derechos
Capítulo Seis de este Comentario
Espantoso drama de dos
grandes bestias apocalípticas
Capítulo 13 de Apocalipsis
La Primera Bestia de Apocalipsis 13
Acto 1 | Escena 6
Su “herida mortal” fue sanada.
La Sexta Cabeza (Rey, Reino) de la primera “bestia” de Apocalipsis 13 recibió una “herida de muerte”, “pero su herida mortal fue sanada”.
La Sexta Cabeza fue el Imperio Romano. ¿Cuándo y cómo recibió aquel Imperio una “herida” tan terrible?
¿Cuándo y cómo fue sanada aquella “herida mortal”?
Esta gran águila con sus alas extendidas parece estar herida y como esforzándose para mantenerse en vuelo, imagen apropiada para simbolizar la Sexta Cabeza de la Primera Bestia de Apocalipsis 13 que sufrió una “herida fatal” la que “fue sanada”. “El águila fue un símbolo prominente usado en la Roma antigua, especialmente como el estandarte de una legión romana.” https://en.wikipedia.org/wiki/Aquila_(Roman)
Estimado lector, estimada lectora, tal vez se pregunte usted:
¿Por qué debería yo tener este asunto como importante para mí?
Entre las razones de por qué lo es para este servidor, destaco la siguiente: porque las profecías acerca de la “herida mortal” proclamadas en 95 EC (Era Común) fueron cumplidas más adelante durante los siglos III y IV EC. Ahora bien, las profecías cumplidas se convierten en HECHOS que, lógicamente, yo, como ser racional, no debería obviar sino confrontar inteligente y objetivamente. Y, por ende, también a sus autores ya que su integridad la comprueban indubitablemente tales “hechos”.
¿Dispone usted de unos pocos minutos para considerar las profecías de esta Escena 6 y su cumplimiento comprobado? ¡Quizás abran paso a descubrimientos, entendimiento y perspectivas vitales aún más grandes!
Apocalipsis 13:3-10
“Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada; y se maravilló toda la tierra en pos de la bestia, 4 y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia, diciendo: ¿Quién como la bestia, y quién podrá luchar contra ella? 5 También se le dio boca que hablaba grandes cosas y blasfemias; y se le dio autoridad para actuar cuarnta y dos meses. 6 Y abrió su boca en blasfemias contra Dios, para blasfemar de su nombre, de su tabernáculo, y de los que moran en el cielo. 7 Y se le permitió hacer guerra contra los santos, y vencerlos. También se le dio autoridad sobre toda tribu, pueblo, lengua y nación. 8 Y la adoraron todos los moradores de la tierra cuyos nombres no estaban escritos en el libro de la vida del Cordero que fue inmolado desde el principio del mundo. 9 Si alguno tiene oído, oiga. 10 Si alguno lleva en cautividad, va en cautividad; si alguno mata a espada, a espada debe ser muerto. Aquí está la paciencia y la fe de los santos.”
[Se sigue el patrón de bosquejo iniciado en la Escena 5.]
G. “Vi una de sus cabezas como herida de muerte, pero su herida mortal fue sanada.” Apocalipsis 13:3
Abre el "Gran Telón de los Tiempos y las Estaciones", y comienza la Escena 6 del Acto 1 del Espantoso drama de dos grandes bestias apocalípticas.
Ahí en medio del escenario se destaca de nuevo aquella terrible bestia que subió del mar.
Juntamente con el apóstol Juan, estamos mirando cuando una de las siete cabezas de aquella bestia recibe una “herida de espada” (Apocalipsis 13:14) tan fuerte como para resultar “mortal”. Mas, sin embargo, sorprendentemente, ¡la cabeza herida se sana!
1. Una de las siete cabezas sufre una “herida mortal”.
Pero, según Apocalipsis 13:12, la propia bestia recibió la “herida mortal”. Este versículo 12 dice: “La primera bestia, cuya herida mortal fue sanada”.
“Cabeza herida”; bestia herida. Por sostener la bestia las siete cabezas, sufre ella cualquier golpe asestado a cualquiera de las cabezas, de la manera que todo el cuerpo humano sufre cuando uno de sus miembros es herido o se enferma.
Este hecho confirma nuestra tesis según la que las “siete cabezas” son siete manifestaciones distintas en la tierra de aquella bestia malévola primordial.
La bestia misma, singular, hace acto de presencia en la tierra en siete ocasiones distintas mediante siete reinos seculares-políticos distintos.
Fijemos bien: en una de sus manifestaciones, sufre una “herida mortal”.
2. “…una de sus cabezas…” significa: uno de los siete reinos seculares idolátricos ya identificados en la Escena 1. La frase equivale a decir, efectivamente: “uno de los siete reyes”, pues los “siete reyes” también simbolizan siete reinos seculares. Apocalipsis 17:9-10
3. “…como herida de muerte…” Tan profunda y severa era esta herida que hubiese causado la muerte bajo circunstancias normales.
4. “…pero su herida mortal fue sanada.”
El reino secular representado por esta “cabeza” sufre una herida que penetra hasta sus órganos vitales. La cabeza misma queda severamente lastimada y esto significa que el reino arriesgue perder la capacidad para mantener su poder, control, organización, y la habilidad de ejecutar sus agendas y movimientos con autoridad y éxito. Tan extensa y profunda es la herida que la gran bestia empieza a agonizarse hasta el punto de sucumbir. Mas, sin embargo, asombrosamente, ¡se recupera! “…su herida mortal fue sanada.”
5. ¿Cuál de los grandes reinos seculares del mundo es representado por la cabeza “herida de muerte” que “fue sanada”? Todas las evidencias señalan hacia el Imperio Romano.
a) ¿Cuándo recibió el Imperio Romano una “herida mortal”?
Al escudriñar los caudalosos datos históricos sobre aquel Reino, encontramos en el siglo III de la Era Común (Edad Cristiana, para los cristianos) eventos y circunstancias que dejaron gravemente herido al Imperio Romano.
b) ¿Quiénes eran los culpables de asestar esta “herida mortal” al Imperio Romano?
Encabezándolos eran los numerosos rivales por el trono de Roma.
Estos se enfrascaron en sangrientas guerras civiles, compitiendo despiadadamente por la corona del Imperio. Sus acciones bélicas debilitaron notablemente no solo a las instituciones gubernamentales sino también la capacidad del Imperio para defenderse contra el enemigo foráneo, destruyéndose o perdiéndose grandes cantidades de recursos de toda índole, incluso, el número muy elevado de soldados heridos o muertos.
_______________________________________________
La Crisis del Tercer Siglo EC que sufrió el Imperio Romano
La Crisis del Tercer Siglo, también conocido como la Anarquía Militar o la Crisis Imperial (235 – 284 EC), fue un período durante el que el Imperio Romano por poco se colapsa bajo las presiones de:
Las invasiones de los bárbaros, las migraciones dentro del territorio romano, las guerras civiles, rebeliones de los peones y la inestabilidad política (la competición de usurpadores por el poder). La dependencia de Roma de mercenarios bárbaros, conocidos como foederati, y sus comandantes, los que trabajaban nominalmente por Roma pero que eran, cada vez más, independientes. También, repetidas plagas, la devaluación de la moneda, la depresión económica, etcétera.
Izquierda. Bárbaros del norte de Europa, más allá del río Danubio, asaltaron al Imperio Romano durante el siglo III y principios del siglo IV. También, lo infiltraron, adueñándose de cada vez más y más territorios. Se trata de los francos, godos, alemanes, sajones, marcomanos, hérulos, lombardos, gépidos, visigodos, vándalos, etcétera.
Ya para principios de 268 EC, el Imperio Romano se había dividido en tres estados competidores entre sí, a saber:
El Imperio Gálico (incorporando las provincias romanas de Galia, Britania y, brevemente, Hispania).
El Imperio Palmyrene (incorporando las provincias orientales de Siria-Palestina y Aegyptus.
Y, entre estos dos, el Imperio Romano propio, centrado en Italia.
Más Adelante, el emperador romano Aureliano (emperador de 270 – 275) reunificó el Imperio.
La Crisis llegó a su fin cuando Diocleciano se hizo emperador, implementando las reformas de 284. https://en.wikipedia.org/wiki/Crisis_of_the_Third_Century
_____________________________________________
c) Colaboraron en el acto de asestar al Imperio Romano una “herida mortal” las masas de esclavos y pordioseros que había, especialmente, en la ciudad de Roma, pues estas multitudes inquietas y revoltosas no contribuían nada a las arcas nacionales. Al contrario, consumían muchísimo, agotando aún más los recursos vitales para la solvencia del Imperio.
Derecha. Orgías en Roma. Muchos funcionarios y ciudadanos depravados. Muchísimos esclavos. ¿Culpables de herir de muerte al Imperio Romano?
d) Se hicieron cómplices del acto los muchos funcionarios y ciudadanos depravados, quienes saquearon, moral y espiritualmente, al Imperio mucho antes de que los bárbaros de otros contornos lo hicieran literalmente.
6. ¿Cómo y cuándo fue sanada la “herida mortal”? Entra al escenario de la Escena 6 un general romano llamado Flavio Valerio Constantino.
a) En primer lugar, nos llama la atención una hazaña importantísima lograda por el emperador romano Constantino el Grande, a saber: él puso fin a las guerras civiles romanas, venciendo a su rival Majencio en 312 EC, e imponiéndose como único emperador en 324.
El general romano Flavio Valerio
Constantino cuenta a sus tropas el sueño que tuvo acerca de la aparición de Cristo y el mensaje de este para él al efecto de que grabara en los escudos de los soldados las letras XP.
“Nacido con el nombre de Flavio Valerio Constantino, en Naissus (hoy, Niš, en la actual Serbia), hijo del prefecto del Pretorio (jefe militar de la Guardia Pretoriana) Constancio Cloro (más adelante en su carrera llegó a ser el emperador Constancio I) y de Elena (la que fue canonizada como Santa Elena).
“Luchó contra los sármatas y se unió a su padre en Britania, en el 306. Fue tan popular entre sus tropas que le proclamaron Augusto cuando Constancio murió ese mismo año.
“Sin embargo, durante las siguientes dos décadas tuvo que luchar contra sus rivales al trono, y no logró ser emperador único hasta el 324.
“En el 312, en la víspera de una batalla contra Majencio, su rival en la península Itálica e hijo de Maximiano, se dice que soñó como que se le apareciera Cristo y que este le dijera que grabara las dos primeras letras de su nombre (XP en griego) en los escudos de sus tropas.
“El día siguiente, la leyenda dice que vio una cruz superpuesta en el sol y las palabras ‘con esta señal serás el vencedor’ (en latín, in hoc signo vinces).
Después de vencer Constantino a Majencio en la batalla decisiva del Puente Milvio, fue erigido un arco de triunfo en el que se proclamó que Constantino había “salvado” al Imperio Romano. El debilitamiento y la caída del Imperio Romano, Tomo I, Página 295. Por Edward Gibbon
“Derrotó a Majencio en la batalla del Puente Milvio, cerca de Roma, en octubre de ese año (312). El Senado aclamó al vencedor como salvador del pueblo romano y le tituló Primus Augustus.
“Constantino consideró que el Dios cristiano le había proporcionado la victoria, por lo que abandonó sus anteriores creencias paganas.” Microsoft ® Encarta ® 2007
Por cierto, lo salvó de la muerte inminente que hubiese sufrido inexorablemente el Imperio de haber continuado las guerras civiles y demás atropellos, hasta dejarlo postrado en el suelo.
Este Arco de Constantino existe hasta el día de hoy en la ciudad de Roma. Fue comisionado por el Senado Romano en honor por el triunfo de Constantino sobre Majencio y dedicado en 315 CE. https://en.wikipedia.org/wiki/Arch_of_Constantine
b) Dados todos estos hechos, no titubeamos en afirmar, sin reservas, que la “herida mortal”, en sentido genérico y metafórico, que sufrió el Imperio Romano, a manos de muchos enemigos dentro y fuera del estado, fue sanada al establecer el emperador Constantino el Grande una nueva capital para el Imperio en Bizancio, cerca de la antigua Troas (Tróada), consolidando las fuerzas militares romanas e infundiendo a la ciudadanía un nuevo espíritu de confianza y poder.
c) La “Nueva Roma” fundada. Roma se salva y se sana, renaciendo. En noviembre del año 324 EC, Constantino el Grande, acompañado por sus consejeros, ingenieros y sacerdotes –sacerdotes, no del paganismo sino del cristianismo ya en plena apostasía- trazó los límites de la nueva capital para el Imperio Romano, llamándola la “Nueva Roma”.
El nombre es muy significante. “¡Nueva Roma!” Es decir, Roma renacida. Roma resucitada. ¡El Imperio Romano salvado y sanado!
La “Nueva Roma”, llamada prontamente “Constantinopla”, fue inaugurada el 11 de mayo de 330 EC
Ya “para el año 337 EC, tenía cincuenta mil habitantes; para el año 400, aproximadamente cien mil; y para el año 500, casi un millón”.
¡He aquí el cumplimiento, al pie de la letra, de lo que se profetizó en Apocalipsis 13:3!
“En menos de dos siglos, Constantinopla llegó a ser la ciudad más rica, hermosa y civilizada del mundo, continuando así por diez siglos.
La Columna de Constantino como existe hoy día en Estambul, Turquía. La original fue erigida en 330 CE para conmemorar la inauguración de Constantinopla como la Nueva Roma, la nueva capital del Imperio Romano. Sobre la original había una estatua de Constantino y el monumento medía cincuenta metros de alto.
“Por espacio de mil años, aquí el Imperio Romano sobrevivía el diluvio de bárbaros que inundaba a Roma (en el oeste). Por ocho siglos después de Mahoma, resistió la ola musulmana que inundaba a Asia, África y España.”
Constantinopla iba a “dominar al alma del oeste por mil años”.
Citas e información tomadas de: La historia de la civilización, Tomo IV, La era de la fe, Páginas 3-5, por Will y Ariel Durant. Recipientes del Premio Pulitzer por su magna obra literaria.
Este modelo muy detallado de Constantinopla capta la grandeza de la ciudad en su apogeo de desarrollo desde el siglo VI hasta su destrucción por los turcos otomanos en 1453 CE.
d) Así que, las evidencias para la sanación de la “herida mortal” asestada al Imperio Romano son realmente abrumadoras. Esta “herida mortal… fue sanada” durante la primera mitad del siglo IV EC, cuando la nueva capital fue establecida, llamándose precisamente la “Nueva Roma”. El establecimiento de esta nueva capital en un lugar altamente estratégica que conecta el continente de Asia con el de Europa, su crecimiento rapidísimo, su asombroso enriquecimiento y la consolidación de las vastas áreas tanto del oriente como del occidente, ¿no significarían todos estos tremendos eventos la sanación de las muchas heridas profundas que el Imperio Romano había recibido? ¿Qué opina usted, estimado estudioso/estudiosa de estos temas de gran envergadura?
Si está de acuerdo y comprende cabalmente que la profecía acerca de la “herida mortal” que sufrió el Imperio Romano fue cumplida 235 años después de pronunciada por Dios y Jesucristo, mediante el apóstol Juan, ¿también aceptaría usted que estos hechos sostienen la veracidad y confiabilidad del libro de Apocalipsis? Y, además, la integridad y veracidad de sus autores Dios el Padre y su Hijo Cristo Jesús?
De responder usted positivamente, ¿no sería del todo sabio recibir y acatar el evangelio de ellos para usted, al igual que para todos los seres humanos? Las buenas noticias al efecto de que los conflictos, las guerra, las tinieblas, los sufrimientos y las angustias de este presente mundo serán reemplazados por perfectos “cielos nuevos y tierra nueva” enteramente libres de todo lo malo y amargo que empañan y dificultan nuestra estadía sobre el planeta Tierra. 2 Pedro 3:11-13; Apocalipsis, los capítulos 21 y 22, etcétera.
Los sencillos pasos a tomarse se presentan en varios artículos y estudios disponibles en este sitio de Internet. Le recomendamos comenzar con El plan divino de salvación.
La cuestión clave de la duración del Imperio Romano
Los historiadores premiados Will y Ariel Durant apuntan que Constantinopla iba a “dominar al alma del oeste por mil años”. Más precisamente, tratándose del Imperio Romano Oriental, desde 330 EC hasta 1453 EC cuando fue conquistado por los turcos otomanos. O sea, 1,123 años.
“Oeste” en este contexto significa el Imperio Romano Occidental. Certeramente, el Imperio Romano, sanado en sentido global (Este y Oeste unidos) de su “herida mortal” durante la primera mitad del siglo IV, no se dividió en dos partes independientes en 476 CE.
Una vez establecida la nueva capital en el este, en Constantinopla, desde ella el gobierno central del Imperio mantenía dominio también sobre la parte occidental, no tratándola como “un imperio independiente” sino como una parte integral del Imperio Romano tenido por uno solo e indivisible.
Andando el tiempo, la parte oriental pierde su potestad militar sobre cada vez más de las extensiones territoriales del Imperio, a la vez que se conservaba sumamente rica e influyente.
Mientras tanto, al pasar los siglos, la parte occidental aflora de nuevo al tomar Carlomagno el título de “Emperador de los Romanos”, no repudiando él la parte oriental sino procurando la unidad de ambas partes.
A través de 1,123 años, ambas partes sufren altibajos. Sin duda, los historiadores Durant se apoyarían en infinidad de evidencias para concluir que la parte oriental, con su grandiosa capital de Constantinopla, iba a “dominar al alma del oeste por mil años”.
Las multifacéticas consecuencias a largo plazo que trajo la sanación de la “herida mortal” que recibió el Imperio Romano pueden apreciarse plenamente solo si se fija correctamente el fin de aquel Imperio en la línea del tiempo. No terminó en 476 CE sino en 1806 CE. No duró tan solo unos 170 años más sino que se extendió largamente a través de casi quince siglos. Contando desde 330 CE, la fecha para la inauguración de la nueva capital romana de Constantinopla, hasta 1806.
La fecha 1806 CE para el fin del Imperio Romano se establece inequívoca e irrefutablemente en el documento detallado: Hechos y ficciones en torno a la duración del Imperio Romano.
La historia pervertida y los errores propagados por comentaristas, profesores, predicadores, maestros, editores y otros escritores, tanto online como en impresos.
Los HECHOS claves son: la Sexta Cabeza-Rey-Monte-Reino de Apocalipsis es el Imperio Romano. Aquel Imperio continuaría como un reino poderoso hasta 1555 EC (Era Común. La Edad Cristiana para los cristianos) y en un estado debilitado hasta 1806 EC.
Definitivamente, no cayó en 476 EC. Estos HECHOS sencillos son verdaderamente esenciales para la interpretación acertada de las profecías de Apocalipsis y Daniel sobre las Siete Cabezas-Reyes-Montes, los Diez Cuernos-Reyes-Reinos y el temible “cuerno pequeño”.
Texto y composición de esta Página por
el autor Homero D Shappley
editoriallapaz2@gmail.com
This study in ENGLISH. https://www.spiritofprophecies.com/mortal-wound-first-beast-healed-when-how
All-English site of Bible studies, sermons, PowerPoint slides, and videos. Por el mismo autor. The Spirit of Truth and Prophecies. www.spiritofprophecies.com
Próximo tema: La autoridad, los poderes y las acciones de la Bestia Sanada.
Índice completo del Capítulo Seis
Hechos y ficciones en torno a la duración del Imperio Romano.
La historia pervertida y los errores propagados por comentaristas, profesores, predicadores, maestros, editores y otros escritores, tanto online como en impresos.
Archivos en PDF para el comentario
Índice de solo los textos que componen el comentario
Lista del contenido completo del comentario, incluso las imágenes
Dios, la política, los gobernadores
del mundo y los cristianos
Dios, la política, los gobernadores del mundo y los cristianos. Diapositiva y TEXTO.
Derechos reservados. Permiso concedido para hacer una copia, o múltiples copias pero ninguna para la venta.