WICCA

¿“Religión universal” que existe “desde

hace millones de años”? 

¿O puro neopaganismo? 

 

 

 

Sam comenta sobre nuestro sitio de Internet:

“Estoy terriblemente en desacuerdo con todo.

Todo lo aquí escrito atenta contra la integridad y libre albedrío del ser humano.

Todo esto sólo puede causar daño, dolor y mal, en general mal. ¿Es lo que pretendía? ¿O simplemente en este “Website está visto que desean que las personas no tengan personalidad ni decisión? Cada uno DEBE hacer lo que QUIERA y ser recompensado placenteramente por lo que hace, siempre que no dañe a otro.

Esta es la religión universal, que lleva existiendo desde hace Millones de Años.

-Haz lo que desees mientras no hagas daño al otro.
-Recibe placer y dalo a los demás como forma de conseguir la felicidad plena.
-Ama a todos, disfruta tu vida, respeta la de los demás, da las gracias, no hace falta que seas practicante.
-Ante todo se feliz.”

Sam

Respuesta

Estimado Sam:

Verdaderamente, sus planteamientos y afirmaciones desafían mis convicciones fundamentales sobre “vida y religión”.

Investigué en Internet el origen, las enseñanzas y las prácticas de Wicca, particularmente, en el sitio “puertasdebabel”.

No pretendo comentar en esta ocasión toda faceta de su “religión”. Me limito a unos puntos claves para mí personalmente.

1. Muy curiosa su dirección de correo electrónico: “afrodita_istar”, los nombres de dos diosas de la antigüedad, diosas del amor carnal y la fecundidad .

“Curiosa” para mí, pero no, supongo, pαra usted, pues Wicca se identifica como el “neopaganismo”.

Esto significa, entiendo, que algunos conceptos o creencias de culturas antiguas, tales como la egipcia, babilónica o griega, son determinantes para su propia filosofía y conducta, y, por ende, moldean su propia “personalidad”, impactando decididamente sus propias “decisiones”.

Así pues, de la manera que los preceptos cristianos moldean la personalidad del que los acepta, practicándolos, asimismo los preceptos del viejo paganismo moldean su personalidad. ¿De acuerdo?

a)  Pregunto: el paganismo al que usted se entrega, ¿anula totalmente su personalidad?

La moldea, pero no la anula totalmente, ¿correcto?

Pues, tampoco el cristianismo puro anula totalmente la personalidad del que lo practica.

Aclaración: “el cristianismo puro” es definido solo en el Nuevo Testamento de la Biblia, y no por iglesias, concilios ecuménicos, teólogos o prelados eclesiásticos.

Su percepción del “cristianismo” estará distorsionada si conoce solo a la Iglesia Católica Romana, las iglesias protestantes o las pentecostales.

b)  Pregunto: el paganismo al que usted se entrega, ¿traba su libre albedrío?

Obviamente, no lo hace, ya que usted lo puede ejercer en cualquier instante, pues, Afrodita e Ishtar no le obligan a seguirlas, ¿cierto?

Si decide usted rechazar al neopaganismo, ¿está en la libertad de hacerlo?

Tomé la decisión de ser cristiano, pero, qué conste: no entregué mi libre albedrío a Cristo, ni pidió él que lo hiciera. Aún lo poseo, y si razones de suficiente peso para un cambio se me presentan, estoy en la perfecta libertad de efectuar el cambio.

Lo que pide Jesucristo de Nazaret es que alinee mi voluntad con la de su Padre Dios, paso que he tomado voluntariamente, y sin perder mi libre albedrío ni borrar todos los rasgos de mi individualidad.

¿Comprende usted?

c)  Estas consideraciones responden a su acusación según la que deseemos nosostros “que las personas no tengan personalidad ni decisión”.

Por haber elegido yo voluntariamente seguir a Jesucristo de Nazaret, natural y lógicamente, sus atributos se imprimen en mi personalidad. Tome nota: ¡sin eliminar mi “yo”, mi “ego”!

Habiendo usted elegido libremente seguir a Afrodita-Ishtar, más otras diosas o dioses del viejo paganismo, los atributos de ellos se imprimen, natural y lógicamente, en su propia personalidad, sin eliminar su “yo”.

¿Son correctas estas afirmaciones?

Ahora bien, quien no siga a nadie, por ejemplo, el ateo absolutamente ateo, puede asegurar, supongo, que su personalidad sea de su propia creación, libre de imposiciones o influencias ajenas. Sin embargo, cuestionaríamos la veracidad de su aseveración, pues, dudamos de que logre, en la formación de su personalidad o carácter, aislarse totalmente del mundo cultural, social, político, filosófico y aun religioso que lo rodea.

 

 

 

2. Apunta Sam: “Cada uno DEBE hacer lo que QUIERA y ser recompensado placenteramente por lo que hace, siempre que no dañe a otro. Esta es la religión universal, que lleva existiendo desde hace Millones de Años”.

 

Cuestionamientos de Homero

 

a) Esta “religión universal” llamada “Wicca”, ¿es producto de la evolución?

Usted, Sr. Sam, plantea que WICCA ha existido “desde hace millones de años”.

Así, que, me parece lógico preguntar: al ir evolucionándose el hombre cavernícola, ¿concibió y desarrolló la WICCA?

¿Serán todas las religiones que existen alrededor del globo terráqueo meras invenciones de nuestra raza humana?

b) ¿Quién originó los preceptos morales o religiosos de Wicca? ¿Con qué autoridad?

c) Estas normas de Wicca para la vida cotidiana del ser humano, ¿cuán prácticas son?

d) El QUERER, ¿quién de ustedes establece sus parámetros aceptables?

Veamos...

El Wicca Fulano “quiere” tener relaciones sexuales con el varón “X”, y “ser recompensado placenteramente por lo que hace”. “X” consiente. El Wicca Fulano hace lo mismo con el varón “Y”, consintiendo este, pero este es HIV positivo, aunque no se lo divulga al Wicca Fulano. Luego, el Wicca Fulano, ya contaminado, sostiene relaciones homosexuales con el varón “V”, porque esto es lo que “quiere”, infectando a “V”, haciéndole un terrible daño irreparable.

La Wicca Fulana, obsesionada con los placeres del sexo, se propone tener sexo con veinte hombres distintos durante el transcurso de un año, y también con diez mujeres. Porque esto es lo que ella “quiere”, y porque “no daña a otro” al hacerlo, pues cada uno consiente voluntariamente, ¿DEBE hacerlo? ¿Le es lícito hacerlo? Su conducta, ¿surte efectos positivos en la raza humana, a corto o largo plazo?

El Wicca Mengano “quiere” usar estupefacientes. No se los ofrece a ningún otro. No los vende. Al ingerirlos, se siente sumamente “recompensado placenteramente por lo que hace”.

¿Quiere usted decir, Sr. Sam, que “debe” usarlos porque “quiere”?

Difícil, para no decir imposible, que no dañe a ninguna otra persona, ya que su ejemplo influye inevitablemente en otras personas, pero ¿qué me dice de hacerse daño a sí mismo? Dañar su propio cerebro, psiquis, intelecto, mente y cuerpo, ¿es aceptable?

He aquí, la superioridad del cristianismo puro sobre el wiquísmo, a saber:

¡Apreciar, respetar y conservar el propio cuerpo de uno como “templo del espíritu” que en él mora!

!Apreciar, respetar y evitar hacer daño al cuerpo físico de todo ser humano!

Pregunto: ¿qué contribución hace el wicco promedio a la “integridad” del ser humano?

Sr. Sam, el placer netamente carnal-animal, al igual los placeres puramente materiales de toda estirpe, perseguidos como fin principal del ser humano, lejos de fortalecer nuestra integridad, tiende a desmantelarla, aunque sea poco a poco.

Históricamente, esto es el caso, evidenciándolo inifinidad de datos relevantes.

El neopaganismo meramente hace repetirse tal historia.

 

 

e) Mi fuertísima impresión personal es que, fundamentalmente, Wicca es la religión de gratificaciones carnales. ¿Me equivoco?

El Wicca, también la Wicca, “recibe placer y dalo a los demás como forma de conseguir la felicidad plena”. ¿Qué “placer”? Principalmente, ¿el placer sexual?

Su “felicidad plena”, definirla, por favor, don Sam. ¿Acaso se trate totalmente de la plena gratificación sexual, carnal, material?

Las directrices del cristianismo puro sobre relaciones sexuales y el matrimonio, seguidas sabiamente, según su naturaleza, y no contra naturaleza, aseguran la plena gratificación sexual, evitando daños físicos o emocionales.

Con todo, la “plena felicidad” del cristiano auténtico no depende enteramente de la gratificación sexual, como tampoco de otros placeres carnales o materiales, sino de la amistad sin barreras que ha logrado conseguir para con su Creador, gracias a las maravillosas obras de reconciliación realizadas por Jesús de Nazaret.

El tal cristiano auténtico es “amigo de Dios”, y, recíprocamente, Dios es su amigo. Esta relación única implica enormes bendiciones tanto materiales como espirituales. No tan solo temporales sino también eternas.

La “felicidad plena” que ofrece el wiquismo, ¿cómo compara con la del cristianismo puro?

¿Acaso se le haga a usted, Sr. Sam, del todo imposible hacer una comparación inteligente y honesta por ser usted tan natural-animal que su espíritu ya no aporte ni una palabra sensata al respecto?

A propósito, al practicante de la WICCA, ¿qué vida le espera en el más allá después de la muerte de su cuerpo físico?

3.  Bueno, Sr. Sam, en su correo dirigido a este servidor, usted no menciona la “magia blanca”, elemento vital de su religión Wicca, ni tampoco los demás rituales paganos que practican sus adeptos, bien sea solitariamente o en “covenes”, conforme al Libro de Sombras, la adivinación, etcétera, etcétera.

Todos estos embrollos del neopaganismo figuran entre las verdaderas causas de “daño, dolor y mal” a nuestra raza, y no el contenido de nuestro sitio de Internet, donde nos esforzamos para presentar al mundo el cristianismo verdadero.

Las gentes, naciones o civilizaciones que han existido, o existen en la actualidad, bajo el manto negro del paganismo, su historia testifica ampliamente a los efectos nocivos de semejante condición.

Wicca propaga y multiplica este gran mal, particularmente entre los jóvenes impresionables, ignorantes e ingenuos, presos del placer carnal, y que buscan ansiosamente cualquier justificación, cualesquier pretextos, para su gratificación inmediata, insaciable y contra naturaleza.

Analícelo, se lo ruego, objetivamente.

Atentamente, su amigo, Homero Shappley de Álamo

 

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