Retrato del atributo “Paciencia”
La bienaventuranza para los misericordiosos pronunciada por Jesucristo se encuentra en Mateo 5:7. “Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.” “El Señor es muy misericordioso y compasivo”, testifica Santiago (5:11). En Lucas 6:36, Cristo atribuye a Dios y Padre el atributo de “misericordioso”, también ordenando a sus discípulos a tenerlo y ejercitarlo. “Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.” Creados los seres humanos a “imagen y semejanza” de Dios, es de esperarse que tengamos todos este atributo. Al respecto, el apóstol Pablo exhorta: “Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo” (Efesios 4:32). Tanto los que practican la misericordia como los que la reciben son realmente bendecidos de muchas maneras.
Retrato del atributo “Paciencia”
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